Crítica: «Simon Boccanegra» en la Ópera de Viena

Por Federico Figueroa Crítica: «Simon Boccanegra» Viena

La ópera Simon Boccanegra no tiene arias famosas ni temas conocidos entre los aficionados. Compuesta en 1857, la obra fracasó en su estreno y Verdi realizó una revisión profunda en 1881. La partitura sirve con maestría al texto y hace fluir con eficacia a su oscuro y ambicioso dramatismo. La puesta en escena que ofrece la Ópera Estatal de Viena (Wiener Staatsoper), firmada por Peter Stein, fue estrenada en octubre de 2002 y la función que aquí nos ocupa es su representación número 97. Esta información está en el programa de mano y me parece valiosa para que el público pueda calibrar su mérito artístico con mejores armas. Visualmente es una oda al «menos es más», donde reina el ciclorama y el estatismo. Algunos elementos de atrezzo, muy bien utilizados, y un telón como los de antaño para recrear el interior de la gran sala del Senado, bastan para dar vida al espectáculo y seguir vigente veintidós años después de su estreno. Stein y su equipo (el escenógrafo Stefan Mayer, la figurinista Moidele Bickel) consiguen, muy acertadamente, concentrar el drama tradicional operístico (un amor prohibido, una madre muerta, un secreto revelado muy tarde, una trama política como fondo, etc.) en la música y en los cantantes. Y ahí radica gran parte del éxito de la puesta en escena, porque el elenco que la interpreta ha brillado con intensidad. La distancia o frialdad deja que el drama del libreto, subrayado con la música, se desarrolle casi desnudo.

Federico Lombardi y Daniel Luis De Vicente / Foto: Stephan Brückler

Destacan en primer lugar las estupendas voces de la soprano Federico Lombardi y el tenor Freddie De Tommaso. Ella dibuja una sensible Amelia Grimaldi, delicada o con una fuerza interna fuera de lo común según el momento de la obra. Espectacular en «Come in quest’ora bruna» y magnífica en el dúo con el Gabriele Adorno, el personaje de De Tommaso. Éste cosechó gran éxito por su potente voz, de bello timbre y elegante fraseo. Muy adecuado el Fiesco, turbio y recio, del bajo sudcoreano Kwangchul Youn, bien timbrado en todo el registro. En las cuatro funciones programadas en abril de Simon Boccanegra estaba programado el barítono Luca Salsi, que ha cancelado por enfermedad y el rol ha sido interpretado por otros colegas. Esta noche lo defendía el barítono Daniel Luis de Vicente, debutando en la plaza, y lo ha hecho muy bien. Sin flaquear en ningún momento, mostró cualidades dramáticas y canoras de buena escuela. Voz fresca y bien manejada que funcionó muy bien Lombardi y sus demás compañeros. Clemens Unterreiner es un buen barítono pero el personaje de Paolo Albiani requiere de una voz más rotunda, capaz de amedrentar a cualquiera. Unterreiner sacó adelante al poliédrico personaje. El resto de cantantes, Dan Paul Dimitrescu (Pietro), Agustín Gómez (Capitán) y Jenni Hietala (Una sirvienta); cumplieron satisfactoriamente sus cometidos y el entusiasmo y redondez del coro completaron una función que fue ganando fuerza minuto a minuto. Crítica: «Simon Boccanegra» Viena

Freddie De Tommaso como Gabriele Adorno en «Simon Boccanegra» / Foto: Wiener Staatsoper / Michael Pöhn.jpg

El maestro Marco Armiliato realizó una lectura muy verdiana, con una línea musical tersa, con dinámicas que beneficiaban al lucimiento de los cantantes. La Orquesta y el Coro titular de la Ópera de Viena respondieron a los cambios de ritmos, que conseguían dar mayor dramatismo a algunas escenas. El público aplaudió con gran entusiasmo a todos los solistas y un poco menos al maestro Armiliato. El resumen, para mi, una gran noche de ópera.


Viena (Ópera Estatal), 11 de abril de 2024.    Simon Boccanegra  Ópera en un prólogo y tres actos. Música: Giuseppe Verdi.   Libreto: Francesco Maria Piave y Arrigo Boito

Dirección musical: Marco Armiliato                 Dirección de escena: Peter Stein

Orquesta y Coro de la Ópera Estatal de Viena (Wiener Staatsoper).         Elenco: Daniel Luis de Vicente, Kwangchul Youn, Clemens Unterreiner, Dan Paul Dimitrescu, Freddie De Tommaso, Federica Lombardi, Agustín Gomez, Jenni Hietala   OW Crítica: «Simon Boccanegra» Viena